Gonzalo Perera

Luis Gonzalo Perera Ferrer (Rocha, 15 de septiembre de 1966) es un doctor en matemática,​ profesor, investigador, divulgador, consultor y escritor uruguayo.​​

Fue profesor investigador de la Universidad de París-Sur (1996-1998) y del Centre National de la Recherche Scientifique de Marsella (2003-2004). Desde 1990 ha sido responsable e investigador de proyectos de cooperación internacional en distintas universidades y centros de formación de América y Europa.​

Es profesor titular de la Facultad de Ingeniería, Universidad de la República, en régimen de dedicación total; es director del Instituto de Matemática y Estadística «Prof. Ing. Rafael Laguardia» y del laboratorio de probabilidad y estadística de dicha facultad. Es miembro del consejo directivo de la Sociedad Bernoulli desde 1997 y elected member del International Statistical Institute desde 2004.

Perera es autor de numerosos trabajos de investigación, publicados en revistas internacionales.​ Sus estudios se enmarcan en performance de redes de telecomunicaciones, métodos generales de investigación científica, estadística de datos dependientes, estadística de eventos extremos, bioestadística, estadística clínica, epidemiología, estadística ambiental y sanitaria, entre otros temas. Fue galardonado en su país con el premio «Roberto Caldeyro Barcia» (2000, pnud) a «una trayectoria en ciencias básicas destacada por su impacto sobre otras disciplinas y problemas de la sociedad y el medio ambiente» y el primer premio de la Academia Nacional de Veterinaria (1998) por sus trabajos sobre hidatidosis. Fuera del ámbito académico, es también autor de libros orientados al público general;​ en su narrativa de crónica y ficción muestra constantemente la aplicación de las matemáticas a problemas cotidianos y su importancia en el desarrollo tecnológico.​

Ha sido consultor estadístico para diversas empresas públicas y privadas, nacionales e internacionales.​ Vinculado a la administración pública, fue vicepresidente de la Administración Nacional de Telecomunicaciones desde marzo de 2008 hasta julio de 2009.

Perera es también columnista de opinión en el diario La República y en Emisora del Sur (Sodre).

Notas

1. ↑ Se graduó de licenciado en matemática en 1989, con el trabajo titulado «Regularidad de las trayectorias de procesos estocásticos gaussianos en espacios abstractos»; en 1991 obtiene la maestría en matemáticas con su tesis «Problemas de ruptura en procesos mixing», y en 1994, el doctorado, con «Estadística espacial y teoremas centrales del límite». El tutor de sus tres tesis fue el también matemático y uruguayo Mario Wschebor.
2. ↑ Universidad de Cambridge (1990-1994); Université Paul Sabatier, Toulouse (1998-2002); Universidad Nacional del Sur, Bahía Blanca (desde 1999); École nationale supérieure des télécommunications de Bretagne (desde 2003); Universidad de São Paulo (desde 2004); Universidad de Valparaíso (desde 2004).
3. ↑ Sus trabajos han sido publicados, entre otras, en las siguientes revistas arbitradas: Annals of Probability, Comptes Rendeus de l'Académies des Sciences de Paris, Annales de l'Institut Henri Poincaré, Journal of Theoretical Probability, International Journal for Parasitology y American Journal of Tropical Medicine and Hygiene.
4. ↑ Malditos números (2009, Fin de Siglo, 142 pp., isbn 9974494524); Banda ancha para todos (2010, Fin de Siglo, 131 pp., isbn 9789974494954); Probabilidad y estadística (2011, Fin de Siglo, 218 pp., isbn 9789974495098); Matemiedos en familia (serie), «Cachirula, Tota y el fantástico señor Riemann» (2012).
5. ↑ Perera invita en forma permanente a desmitificar la «frialdad» de las matemáticas, y a rescatar la sensibilidad de las ciencias abstractas:

   Porque la matemática no es más que un lenguaje, una vía, un camino. Uno de los posibles caminos para llegar a la armonía, el camino de la razón. En absoluto opuesto, sino complementario y socio perfecto del camino de la sensibilidad y el corazón. Lenguaje que a muchos les es esquivo porque otros lo enseñamos mal y a la sociedad no le gusta difundir debidamente esta poderosa herramienta. Que permite resolver cosas, pensar un poquito mejor algunas cosas, y por lo tanto ser más libre. Y dejar más y mejor espacio para el pleno desarrollo de la sensibilidad y los afectos. [...] Yo amo a la matemática y a veces la odio. Más de una vez la habría mandado al infierno para dedicarme a otra cosa. Porque es dura. Porque en Uruguay es mucho más dura aún. Porque se paga mal y no se reconoce en absoluto. Porque encima hay mucho ego descontrolado en el ambiente académico y matemático que a veces vuelve insoportable la convivencia laboral. Pero siempre vuelvo a ella. Por dos cosas: por lo mucho que permite resolver y, ante todo, por los afectos. Hacia quienes fueron mis maestros, hacia quienes son mis compañeros, hacia los alumnos. [...] Tome este texto como un torpe convite a mirar la matemática sin temores ni odios, que no es ningún cuco. Es simple cuestión de estímulos. Tome la matemática como una inmensa oportunidad para entender y sentir mejor, y reitero y enfatizo “sentir”, que quien entiende de qué va la vida sin lograr sentir, o es una amenaza para el prójimo o simplemente desperdicia su breve instante de existencia. [...] Si hay algo imperdonable para nuestra pequeñez y fugacidad es no llenarse la vida de pasiones, sentires y afectos, y los números bien pueden colaborar, y mucho, en esa búsqueda.

   Malditos números

6. ↑ Intendencia Departamental de Montevideo, Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas, Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, Rhône-Poulenc, Aventis.

Referencias